La ley de la dependencia se acerca a la ciudadanía

Conocer la ley de dependencia, todo lo que ofrece y, también, el empleo que produce y la formación que requiere. Ese fue el objetivo de unas jornadas informativas organizadas por la Asociación de Vecinos y Vecinas Zaide, que reunieron, sobre todo, a mujeres.

La voluntad de la Asociación de Vecinos y Vecinas Zaide de Alcaudete consiguió que muchos de los residentes en la villa, mujeres en su mayoría, conocieran, la  semana pasada, varios aspectos de la ley de dependencia. La jornada corrió a cargo de Ángeles Cobo, concejal de Bienestar Social; Trinidad Olmo, directora del Centro Comarcal de Asuntos Sociales y Victoria Nieto, trabajadora social. Una actividad en la que se consiguió, incluso, que la normativa se debatiera por parte de personas que no tenían conocimiento, hasta el momento, de esa ley: se expuso su utilidad, se habló de derechos, de deberes y de autonomía personal.

“Zaide”, de manos de su presidenta, Francisca del Puerto, logró, además, reunir a un amplio número de féminas y a algún que otro hombre en el edificio de Asuntos Sociales del municipio, donde se dio una conferencia con unos objetivos comunes:  aclarar qué es la ley de dependencia, deshacer esa maraña que acompaña a los asuntos legales, romper ese miedo y fomentar la actividad física e intelectual en los mayores alcaudetenses, un envejecimiento activo que evite futuros problemas de salud.  “Pero si ayuda a las personas que lo necesitan, porque no pueden valerse por sí mismas, ¿por qué tarda tanto y muchas veces incluso llega tarde?”, lamentó la promotora de la iniciativa, Francisca del Puerto.

“La ley está en aplicación. En España hay muchas personas dependientes y se están contabilizando; eso lleva su tiempo”, comentó Ángeles Cobo. “Pretende mejorar la calidad de vida de las personas, pero tiene defectos”.

Se hizo referencia a los puestos de trabajo que genera su aplicación, muchos asociados a una formación previa. Y es que, en contra de lo que mucha gente piensa, según apuntaron no es nada fácil “manejar” a una persona con discapacidad física; no basta con tener fuerza, hay que saber usarla y no sólo por el bien del usuario, sino también por el del asistente —posturas incorrectas pueden llevar a daños en la espalda—. “Se necesita gente cualificada y de ahí la importancia de estos cursos y, sobre todo, de tener conocimiento de esta ley”, afirmó Del Puerto.

Información extraída de Lunes, 01 de Noviembre de 2010  Diario JAEN PROVINCIA -